El mundo ha cambiado, las condiciones sanitarias han hecho que el uso de la mascarilla sea necesario para la salud de todo el planeta. No es algo cómodo ni algo a lo que estamos acostumbrados, pero como personas adultas debemos dejar de lado nuestras preferencias para mirar por el bien común
Tipos de mascarillas
Las mascarillas se pueden distinguir en tres grupos
Mascarillas higiénicas
Mascarillas quirúrgicas, pensadas para mantener la asepsia y no dejar pasar las gotas de saliva que pueden transportar virus o bacterias.
Mascarillas autofiltrantes: Dentro de ellas podemos diferenciar:
-FFP1: Usadas para productos no tóxicos.
-FPP2: Con una eficacia de filtración del 92%.
-FPP3: Con una eficacia del 98%
A su vez existen las mascarillas llamadas N95 con un nivel de seguridad que se sitúa entre las FFP2 y FFP3
Uso correcto de la mascarilla
Es importante usar las mascarillas de forma adecuada para conseguir una máxima eficacia. Esto se consigue si la mascarilla está correctamente ajustada al rostro. En caso contrario las bacterias y virus pueden acceder fácilmente a nuestro aparato respiratorio.
Para un correcto uso, debemos seguir los siguientes pasos:
-Lavarse las manos con un desinfectante o agua con jabón.
-Asegurarse de que la mascarilla cubre correctamente boca y nariz para no dejar espacios donde los virus puedan introducirse.
-Evitar tocar la parte interna de la mascarilla con nuestras manos.
Para retirar la mascarilla, conviene seguir estos pasos:
-Lavarse las manos con agua y jabón o gel desinfectante a base de alcohol.
-Evitar tocar la parte delantera de la mascarilla.
-Quitarse las gomas, desde abajo hacia arriba sin tocar la parte delantera.
-Colocar la mascarilla en un recipiente valido y volver a lavarse de nuevo las manos
Consejos para respirar de forma adecuada
Cuidado a la hora de hacer deporte:
Para mantener la respiración sin agobiarse es importante respirar pausadamente. Cuando hacemos ejercicio el organismo necesita más oxígeno, por lo que la respiración es más profunda. Sin embargo, aumentar la frecuencia en la respiración no es bueno si vas a usar mascarilla. Esto hará que respires peor y acabes agobiado y ansioso. Se ha comprobado que el uso de mascarillas a la hora de hacer deporte aumenta la percepción de disnea.
Engaña a tu mente:
Llevar mascarillas no es cómodo, todos lo sabemos. Más aun, en tiempos de calor donde el organismo empieza a sudar y la humedad hace más difícil el respirar. Si nos centramos en la queja, lo único que haremos será llevarnos de ira y enfado. Todas estas emociones generan ansiedad aumentando la frecuencia cardiaca y acelerando la respiración.
Para controlar correctamente las emociones es necesario contar con el sesgo atencional. Si le prestas mucha atención al calor y a la respiración, lo interpretas como algo negativo y se libera adrenalina. El corazón bombea más rápido aumentando los niveles de ansiedad y la sensación de agobio. Lo aconsejable pues, es dirigir la atención hacia otro foco. Cierra los ojos, visualiza una playa o vete de compras. El cerebro olvidará que estas usando la mascarilla.
Respiración abdominal:
Es una respiración muy usada en actividades como meditación, yoga o incluso Pilates. Esta respiración comienza en el estómago que se va hinchando como un globo hasta alcanzar su punto álgido para luego disminuir. Esta respiración te ayuda a relajarte.
Respiración consciente y aceptación:
Respira de forma consciente, intenta no agobiarte y tomártelo con sentido del humor. Es difícil, pero debemos adaptarnos a la situación por el bien de todo el planeta.